Un exótico viaje por el Mediterráneo, siguiendo los pasos de una vasija creada por Musas Griegas, nos hará testigos de apasionantes historias a lo largo del tiempo y en distintos puertos...

 

" ... El Viaje en su primera parte es en el tiempo

Las musas descienden a la Tierra, actuando de mediadoras entre lo divino y los seres humanos gracias a la inspiración que transmiten a los poetas, proporcionándoles el conocimiento de lo Eterno."¡Salud Musas, hijas de Zeus! Otorgadme el hechizo de vuestra inspiración y canto."

Las musas crean la vasija....

Las musas le entregan la vasija a Dionisos, dios del vino, inspirador de la locura ritual y el éxtasis. Y este será el encargado de entregárselo a los hombres...

Arrastrada por el mar Mediterraneo viaja mecida entre olas a diferentes lugares.

 

FIN DEL VIAJE GADES, La Sirena del Mar

La vasija llega a Gades, allí es recogida por una cultura milenaria, una cultura sin igual, la cultura Andaluza.

La vasija, feliz de haber encontrado los ecos de las voces que la crearon, decide permanecer en aquella hermosa tierra llena de sol que fue testigo de alegres canciones y numerosos romances.

Finalmente la vasija, cansada de sus andanzas, acumula sabiduría en su interior y decide terminar su viaje en una humilde taberna andaluza donde sirve para albergar el néctar de los dioses, la bebida de su Dios el que la hizo partícipe de tantas historias.

Así sirvió de inspiración a poetas y artistas y aquello le volvió a mantener unida a las musas que la crearon, proporcionando a las gentes el éxtasis o vuelo del alma fuera del cuerpo.

Albergar el vino, bebida desde dioses, monarcas y pobres, fue su último viaje. Permanecíó hasta hoy en ese lugar, enamorada de las hermosas voces rotas del alma."